Durante el primer trimestre, seguramente sentirás un cansancio agotador. Esta fatiga es un efecto colateral de todos los cambios físicos que se producen en tu cuerpo, incluyendo el espectacular aumento en los niveles de hormonas. Este agotamiento desaparecerá cerca de la semana 12 o 14 del embarazo. A medida que disminuya la fatiga, seguramente te sentirás con más energía y como si no hubiera pasado nada; Así hasta la semana 30 o 34, cuando es posible que te canses de nuevo. Mientras tanto, recuerda que la fatiga es la señal que te envía la naturaleza para decirte que descanses más. Si puedes, trata de hacer una siesta corta durante el día y acuesta por la noche más temprano que de costumbre.
Fuente: Stone, Eddleman & Duenwald